Humillación de cornudo sin condón: viendo cómo un twink se masturba

En el reino de la cornuda, me encontré en una situación peculiar.Mi amigo íntimo, un yogurín con un mordisco por el BDSM, me había invitado a pasar por una noche de depravación.Sin saberlo mío, tenía un secreto: una relación de cornudo bisexual con su pareja.¿El giro?Quiso que me uniera.Mientras me acomodaba, reveló su plan.Su pareja iba a llegar pronto, y yo iba a ser el participante involuntario en un espectáculo humillante.Mientres esperamos, me provocaba, sus ojos se llenaron de picardías.Cuando su pareja llegó, comenzó la verdadera diversión.Me hizo ver como su pareja, un yogrín impresionante, se complació, todo mientras mi amigo me provocaba.La tensión se construyó cuando el yogurén se acercó, su mano moviéndose más rápido.Yo era impotente para intervenir, solo permitía ver cómo se llevaba al clímax, todo mientras que mi amigo lo grababa.La humillación fue intensa, pero el encanto de la fruta prohibida era demasiado fuerte para ponerme a mil mil, esto era una cornuda resistencia a su más entimidación.